En Sallén Aviación, con más de 40 años de experiencia en el sector aeroespacial, defensa e ingeniería de fabricación, la innovación y la precisión son pilares fundamentales de nuestro trabajo. Dentro de nuestras divisiones técnicas, la electroerosión ocupa un lugar destacado como técnica avanzada de mecanizado. Esta tecnología permite trabajar con materiales altamente duros y resistentes, con formas complejas y tolerancias mínimas, todo sin contacto físico entre herramienta y pieza.
La electroerosión por hilo es una solución ideal para sectores como el aeronáutico, donde cada milésima de milímetro importa. Y en este artículo te explicamos cómo funciona y por qué marca la diferencia en proyectos que requieren excelencia.
La electroerosión (EDM, Electrical Discharge Machine) es una técnica de mecanizado no tradicional que elimina material mediante descargas eléctricas controladas entre un electrodo (el hilo) y la pieza a trabajar. Este proceso se lleva a cabo dentro de un líquido dieléctrico, que puede ser agua desionizada o aceite mineral, que evita el contacto directo, elimina residuos metálicos y enfría el sistema. La alta temperatura generada por las chispas (hasta 12.000 ºC) funde y evapora pequeñas porciones del metal con una precisión inigualable.
En Sallén Aviación, integramos este proceso dentro de nuestra división de mecanizados, junto con centros de 3/4/5 ejes, tornos fresadores multitarea y procesos de rectificado, aportando soluciones completas y eficientes a nuestros clientes del sector aeroespacial y de defensa.
La electroerosión es clave en numerosas fases de fabricación y reparación de piezas aeronáuticas:
En aeronáutica, se requieren cortes interiores con formas específicas y difíciles de alcanzar con herramientas tradicionales. La electroerosión permite:
En sistemas de defensa, los componentes suelen estar sometidos a condiciones extremas. La electroerosión se aplica en:
Además de la fabricación, la electroerosión permite la reconstrucción parcial o el mecanizado de zonas dañadas, extendiendo la vida útil de piezas costosas y complejas, reduciendo el desperdicio y optimizando la cadena de suministro.
En Sallén Aviación, combinamos la tecnología de electroerosión con una planificación meticulosa, garantizando los más altos estándares de calidad y trazabilidad:
Gracias a su naturaleza sin contacto, no hay deformaciones térmicas ni mecánicas. Esto es fundamental cuando trabajamos con piezas críticas que encajan dentro de sistemas más grandes.
Los acabados pueden alcanzar valores de rugosidad muy bajos, lo que evita retrabajos y mejora el comportamiento aerodinámico y funcional de las piezas.
La ausencia de utillajes especiales y la versatilidad del sistema permite fabricar piezas únicas o de series cortas con una excelente relación coste-beneficio.
Cualquier material conductor de la electricidad. Esto incluye aleaciones de titanio, acero templado, cobre, Inconel, entre otros.
Sí. Existen máquinas de gran formato y sistemas de hilo largo capaces de trabajar piezas voluminosas sin comprometer la precisión.
La electroerosión por hilo utiliza un hilo conductor que se desplaza con precisión para cortar la pieza, mientras que la por penetración (EDM de molde) emplea un electrodo con forma fija para crear cavidades. Ambas técnicas se usan en función de la geometría deseada.
La electroerosión en aviación es una herramienta clave para cumplir con las exigencias de precisión, calidad y fiabilidad que demanda la industria. En Sallén Aviación, esta técnica forma parte de un ecosistema de soluciones tecnológicas donde cada proceso está diseñado para entregar excelencia.
Desde la compra de la materia prima hasta la entrega final, gracias a nuestros procesos certificados, nuestros clientes obtienen no solo piezas, sino soluciones con los más altos estándares de calidad.
Contáctenos para conocer cómo la electroerosión puede potenciar su próximo proyecto.